Sí, es verdad. Jonathan ha llegado a su nuevo equipo el L.A. Galaxy. El mexicano de 27 años de edad (¡Sí tan solo 27 años de edad!) ha sido presentado en el que será su nuevo equipo a un año de que se dispute el mundial de Rusia 2018. Es evidente que varias fueron las razones que motivaron al mediocampista a tomar esta decisión, entre las que destacan el volver a unirse con su hermano y el mucho dinero que estará ganando.
Esta será la tercer ocasión en que los hermanos Dos Santos compartan la cancha, pues recordemos que jugaron juntos en el Barcelona en la primera década de este milenio y hasta que el mayor de los hermanos dejó al equipo español para jugar con los Spurs en Inglaterra. Posteriormente, se volvieron a encontrar en la temporada 2014-2015 donde los dos jugaron para el equipo español Villarreal y fue terminando esta temporada que Giovani decidió emigrar a los Estados Unidos y convertirse en uno de los futbolistas mejor pagados de la actualidad. Ahora, una vez más se vuelven a encontrar para la presenta campaña, dónde seguramente los dos serán titulares indiscutibles y se cumplirá su sueño de vestir la misma camiseta y ganar campeonatos con ésta.
Otra de las importantes razones por las que el menor de los Dos Santos decidió emigrar al continente americano es la importante suma de dinero que percibirá. Se estima que su contrato se cerró en 5.8 millones de dólares y estará ganando entre dos y tres millones de dólares al año, cifra demasiado atractiva para un jugador de 27 años. Aunado a esto vivirá en una de las ciudades más importantes de Estados Unidos, la cual es una ciudad de primer mundo y seguramente nada le faltará.
Aunque todo esto suena ideal, y sin duda lo es, me parece que es una decisión que ha tomado para llegar a una zona de confort, para no esforzarse más por estar peleando la titularidad con jugadores de élite. Sabemos que en el L.A. Galaxy será una de las estrellas y la titularidad la tiene casi garantizada. Por eso, creo que para Jona ha sido una decisión conformista y que podría terminar con su carrera.
Pasó años intentando ser considerado para el primer equipo del Barcelona, y muchos le insistían que no tenía cabida ahí; incluso desperdició un año en este equipo porque creyó que tendría oportunidad de jugar en el mejor equipo del mundo. Y fue terminando esa temporada que se dio cuenta que su nivel no era estar al lado de Messi, Iniesta y compañía. No obstante, el talento del mediocampista lo llevó a jugar y ser titular en un equipo importante de la liga española, teniendo destacadas actuaciones con el Villarreal y en ocasiones se convirtió en titular indiscutible.
Todas estas grandes actuaciones le valieron para ser considerado en la Selección mexicana, siendo pilar importante en el medio campo, e incluso brindando actuaciones muy loables, que pusieron a soñar al equipo mexicano que ahora sí se podría trascender con un equipo plagado de jugadores que juegan en los mejores clubes europeos.
No obstante, el problema radica en que justo cuando estaba en la cima de su carrera y jugando de manera regular en un equipo importante y generando gran fútbol, decide tomar esta decisión que a mi parecer acabará con una carrera a la que le quedaban algunos años más en el fútbol de élite. Pudo haber sido un jugador que aportara mucho a la selección y siendo titular en cualquier equipo importante de Europa. Pero, ahora tan sólo a sus 27 años de edad y a un año de que se dispute un mundial va a jugar en un equipo en el que seguramente se verá mermado su juego como le pasó a su hermano Giovani Dos Santos.
En el futuro, seguramente seguirá jugando en la MLS o en la liga MX, pero veo difícil que con esta decisión regrese al fútbol europeo. Y lo que es peor, con su nivel de juego que irá en picada, seguramente pronto dejará de ser considerado para la selección mexicana. Lástima por uno de los jugadores con más talentos del fútbol mexicano.