“Señoras y señores como pájaros de fuego hacia sus sueños, siendo los actuales campeones de la CONADEIP, y con trayectoria perfecta llevando 6 partidos ganados de 6, los Aztecas de la UDLAP”, presentó un narrador a los locales.
El tomahawk comenzó a sonar en todo el recinto que aun no mostraba un lleno total, Los Aguiluchos del Centro Escolar Niños Heroes de Chapultepec (CENHCH), realzaron aún mas con sus instrumentos, la entrada de los guerreros verdes. El ruido fue tal, que enmudeció la entrada de los Borregos de el Tecnológico de Monterrey Campus Puebla a tal punto que paso desapercibido su ingreso al templo.
Era una fiesta que en la mente de los locales, sería con todas las galas para ellos, y cuando llevas ganados todos tus partidos recientes mostrando categoría y borrando del campo a tu rival, tienes los argumentos para hacerte esa idea.
La fiesta comenzó desde mucho antes a la entrada de los guerreros, con sentimientos raros sobre el emparrillado, nostalgia y anhelo, que sumado a lo que nunca falta que es el orgullo se dio el resultado de un ambiente de solemnidad.
Robín González, Rodrigo Rivera, Alejandro López, German Meza, Alfonso Rivera, Joachim Ruiz, Jean Claude Madin, todos pasando a través de una alfombra verde entre 2 largas columnas de jade que eran formadas por sus compañeros.
“Respeto y admiración para estos jóvenes que dieron varios años de su vida por estos colores” recitó el sonido local, cuál mosqueteros los guerreros aztecas presentaron sus armas, no fusiles y mucho menos espadas, solo sus extremidades de forma simbólica, el resto de la tribu les decía en ceremonia de “Seniors” a estos compañeros de mil batallas un mensaje claro “nunca dejaran de ser aztecas, no importa lo que pase”.
Siguiendo con honores los 7 fueron los elegidos para ir al centro de el campo y presenciar el tradicional bolado.
Todo listo y las cosas iniciaron con toda la intensidad posible, el hambre de los jugadores era tremenda, ya no importó el previo ni las razones, que porque somos aztecas y punto, de voz de Zumalacárregui, o un este día van a saber que Puebla no es de ellos, hoy muchachos vamos a romperla.
Solo batalla sobre el césped, tacleadas rotas, jugadas leídas, todo se tornó con más violencia conforme las series avanzaron, era tal la emoción que genero el choque que uno no se dio cuenta cuando se paso de el primer al segundo cuarto.
De pronto vino el primer error, intento de pase de los Borregos buscando a su Wide Reciver derecho, pero solo eso intento.
“ Pase cruzado del cuadro azul y se interpone Fabrizzio Giombini que va tener el ovoide se deprende de la marca y ya va en la 50, la 40, la 20 Touchdown de la tribu verde” se emocionaron los narradores con esta acción.
Caso contrario en la banca de los de la Atlixcáyotl, mandaba a sus pupilos el coach Lira que tuvieran la cabeza fría. Todo quedo un deseo, a los 30 segundos, espejito espejito a la jugada anterior y Giombini volvía a las diagonales gracias a una intercepción.
Dicen varios cánones que para lograr cualquier cosa en el deporte, lo primero que tiene que suceder después a una indicación del directivo, es que el jugador o jugadores se crean la hazaña que están por hacer.
Entre compañeros se voltearon a ver en las bancas con 2 ideas, 14-0 y ¿Qué vamos a hacer?
Murmullos cubrieron el área técnica blanquiazul en la cual fue difícil distinguir el mensaje, lo único comprensible. Un movimiento con la cabeza asintiendo.
Carlos Farias en los controles y el peso a tratar de levantar las acciones que pintaron pesimistas para su equipo.
Del otro lado un área técnica que ya sentía el partido con triunfo, la confianza era plena pero aun quedaba el pendiente que anotara la ofensiva, Eric Fisher estaba analizando la forma de lograrlo platicando con Diego Ruíz.
De pronto el espíritu emprendedor los sorprendería. Una jugada extraña en la que el corredor Mauricio Valverde se convirtió en Quarterback improvisado y mando un pase de 30 yardas para que Anuar Ramírez diera una escapada y tocara la puerta de los primeros puntos para su causa, situación que se materializo gracias a un acarreo de Edgar Rivera.
Momentos después, otra vez los borregos se encontraron en zona favorable, y esta vez vía área obtendrían los puntos para el empate.
Faltaban 3 minutos para irse al medio tiempo y en este mismo, llego un momento de calma sobre el césped en el que los aguiluchos por las fechas presentaron un número con la canción de “Thriller”.
No representaron terror ya que no era su motivo, el verdadero miedo vino cuando en el restante de el cuarto y cuando empezó el tercer cuarto.
El juego de los visitantes puso en Jaque al cuadro local, cosa que no se había visto en toda la temporada, por supuesto las gradas entendían lo que sucedía en el campo de batalla y 2 reacciones se manifestaron, los de el espíritu emprendedor con sentido humano, corearon con más fuerza su “¡Azul, azul, Azul!”.
Para los locales un sentimiento desconocido, el miedo, nerviosismo disfrazado de duda en la pregunta ¿Hoy podremos o hoy será el día que nos rompan el invicto?
Hasta el punto que cada vez que los visitantes estaban teniendo una serie ofensiva, la tribuna se empeñó en hacer el más ruido posible, con tal de distraer a Carlos Farias.
Vino un respiro cuando por fin la línea ofensiva anoto con pase de Diego Ruiz a Jean Claude Madin, pero rápidamente vino la respuesta de los borregos que faltando 29.3 segundos hicieron la anotación que desbordó la alegría para su causa e incremento el nervio para los de verde.
Finalizo el cuarto y yo solo pensé que podrían decir los coachs a sus jugadores, deje volar el imaginario, podría ser que el coach Lira les dijera “Muchachos, nada es invencible, no hay muralla que no caiga, solo vean lo que hicieron en este cuarto. Íbamos perdiendo por 14 puntos contra la mejor defensiva y vean el electrónico 21-21, tienen miedo, se sienten los nervios, señores hoy no estamos jugando contras los aztecas, no no, estamos jugando contra la historia es momento de demostrar y desaparecer de una vez por todas esos fantasmas de palizas, así que salgan a comerse el partido y demuéstrenle a todos que nada es invencible y que hoy el que se llevara la victoria se llama Borregos Puebla, ¡Vamos azules!”
Y pues del lado Azteca, un discurso más técnico “Muchachos que esta pasando, hagan lo que saben hacer maldita sea, necesito que se concentren, nos están poniendo la cosa difícil pero, no olviden algo, algo que los capitanes les recuerdan cada vez que va iniciar el juego, son aztecas ¡Así que salgan y demuestren porque somos campeones y vamos invictos esta temporada!
El tercer cuarto inicio y ninguno soltó el acelerador, aunque parecía que nuevamente se apelaría a defensas extraordinarias, varios errores catapultaron a Diego Ruiz y compañía a estar a poco yardaje de la tierra prometida y vía acarreo con Jordan Brooks conseguieron el 28-21, a diferencia de las anteriores veces y a pesar de el esfuerzo de los de la Atlixcayotl no pudo existir respuesta rápida.
El tercer cuarto transcurría y los aztecas querían aumentar la ventaja para no llegar presionados al ultimo cuarto, de pronto un pase profundo de Diego Ruiz a Robín Gonzales que con toda la clase y experiencia que representa ser un Senior, tomo el ovoide con una recepción a una sola mano para pasar el plano imaginario y hacer la anotación.
Todo el templo del dolor se tranquilizó después de eso, pero los visitantes no bajaron los brazos y a pesar de que en esta ocasión no tenían a la mayoría de la afición en su favor, al igual que en el partido anterior entre estos 2 rivales empezaron a empujar, hasta que lograron ponerse de cara al puntaje otra vez y esta vez con Alberto Lemus vía aérea.
El último cuarto con 35-28 estuvo marcado por decisiones de matar o morir, lo primero que sucedió fue una cuarta oportunidad en la yarda 20 de los aztecas, con ellos al ataque, si el Tec los detenía se ponían a soñar con un final histórico.
Desde el palco de narradores, atónitos se relato:
“Jugada de engaño, Kevin Correa tiene el ovoide y va a tratar de doblar la esquina, le caen 3 a la marca, rompe el tacleo y ya pasa la marca de el primero y 10, va más allá y le mete velocidad, la 30, la 20 y Touchdown para la tribu verde”
A pesar de incrementar la ventaja la zona técnica sabia al igual que todo el recinto que todavía nada era seguro.
Vinieron Carlos Farias y Mauricio Valverde quienes habían sido la columna vertebral de el ataque a intentar la hazaña, moviendo las cadenas se pusieron a 5 yardas de poner a temblar a todos.
PRIMERA Y GOL
La confianza en Valverde para tratar de ejercer la ley de el ex, dobla la esquina pero solo consigue una yarda, ya que es detenido con un tacleo pandilla.
SEGUNDA Y GOL
Otra vez por tierra sin embargo esta vez no consiguen nada para su causa los borregos.
TERCERA Y GOL
Pase de Carlos Farias, cuidado puede ser interceptado, solo es bateado y van a ser quedarse en las mismas, el coach Lira mantiene a los mismos hombres en el campo va a jugarse la cuarta oportunidad.
Paso en 4 segundos, la esperanza puesta en esa jugada que marcaria el rumbo de el juego
Cuatro, saca el centro el cuadro borrego, Tres, vía terrestre con carrera de poder, Dos, Una maraña de cuerpos en la línea de golpeo dificulta ver lo que pasa, Uno, Balón suelto que recupera la defensiva azteca va a tratar de salir a velocidad pero lo detienen en la yarda 8.
“C’ est fini” después de eso la tribu verde se empeño en agotar el reloj, lo cual logro y el marcador final reflejo un 42-28.
Bancas y jugadores de los 2 equipos se despidieron y fue cuando las amistades se reflejaron. En el palco se menciono lo que va a pasar en los siguientes juegos y salió que los aztecas enfrentarían a Tec Guadalajara de el coach Enrique Villanueva, la leyenda de la UDLAP, finalizó el análisis de ese dato con un mensaje que reflejaron sobre el césped al mismo tiempo que salían las palabras, un abrazo entre Mauricio Valverde(tec) y Tamayo(UDLAP) “nunca dejaran de ser aztecas, no importa lo que pase”.